La historia del año

Pido disculpas por si alguien se ha creado demasiadas expectativas, pero el título es del todo cierto. Todo ocurrió en clase de alemán. A simple vista nada me hizo presagiar que iba a ser una clase trepidante que haría que viera la vida de otra manera. Resulta que nos explicaron cómo se llamaban los meses del año en ese idioma. El idioma en si es igual, después de pasar noches en vela i pensar en los idiomas que más o menos conozco, me di cuenta que podría haberme hecho preguntas que no me había hecho nunca.  

La profesora decidió que la manera más sencilla de que nos quedara la traducción era explicando una breve historia o un breve significado del nombre. Así que comenzó:

Enero i febrero –> Mitología e historia (tengo un don que consiste en no retener datos mitológicos, históricos ni filosóficos, siento no poder extenderme más)

Sé que por ahora está siendo muy pobre la explicación, pero ahora se anima el cotarro. 

Marzo -> viene de Marte, dios de la guerra (Oh! Milagro retuve un dato!!!) Pero bueno, esto es lo de menos, resulta que marzo era el 1r mes en el imperio romano, pero se cambio porque había que hacer no se qué historia que solo se podía hacer a principio de año y como estaban en enero dijeron, ¿para qué esperar? Enero es principio de año a partir de ya. 

Abril, mayo y junio -> Poca chicha

Julio –> No se qué nombre tenía antes pero se cambio por Julio, porqué el modesto de Julio César decidió que el merecía muchísimo  más que un imperio que estaba por toda la Galia, ¿toda? No, había una pequeña aldea que… en fin que era poco para él, así que decidió ponerle su nombre a un mes.

Agosto -> Octavio Augusto que casi no era envidioso dijo: “¿Qué Julio César tiene un mes? Pues yo no voy a ser menos”. Pero claro julio tenía 31 días y en aquel entonces agosto no, así que agosto le robo un día a febrero. A este hombre le debemos mucho, ya que gracias a él podemos saber cuántos días tiene cada mes con la regla de los nudillos.

Septiembre, octubre, noviembre y diciembre -> Confirman que marzo era el primer mes; septiembre viene de siete, octubre de ocho, noviembre de nueve y diciembre de diez. ¿Cómo he podido estar tan ciego?

En fin, espero que os haya resultado interesante esta historia que a mi tanto me lo ha parecido. Quizás muchos de vosotros la habías deducido, pero yo, como dice el friki metrosexual del diario de Patricia que sale en el APM: “la verdá e’ que nunca mavia preguntado ezo”